Desde la existencia de la Iglesia cualquier persona o grupo que no esté de acuerdo con sus dogmas es considerado como hereje. Tanto es el poder que tiene que puede ser comparado como el político, la manera en la que manipulan a la población es muy parecida.
Anteriormente los que iban en contra de la Iglesia no contaban con un muy buen final, hoy en día existe un pensamiento más libre en donde puedes ir en contra de los dogmas de la institución católica y seguirás con vida.
En este artículo podrás conocer qué fue el catarismo y cómo fueron exterminados por la Iglesia por no seguir los mandamientos nuevos que había impuesto la Iglesia.
¿Qué es el Catarismo?
El catarismo fue un movimiento hetérico que surgió en el S. XII, iba en contra de los dogmas que implantaba la Iglesia católica. Desde esa época empezó a difundirse por todo el continente europeo, tenía es en especial un gran arraigo en el sur de Francia. Allí tenían la protección de señores feudales y vasallos que eran del Reino Aragón.
Primero que nada es importante conocer la etimología de catarismo, «καθαρος» (katharos) o del latín «cathariste» y del sufijo «ismo» que comprende alguna tendencia, teoría o doctrina.
El catarismo tenía influencias del maniqueísmo en sus dos etapas: puliciana y bogomila. Ellos tenían un pensamiento de dualidad creadora, de Dios y Satanás. La salvación la predicaban por medio del ascetismo y el completo rechazo que le tenían al mundo material, porque para ellos esto era como una obra demoniáca.
Por esta razón la Iglesia católica los empezó a considerar con doctrinas heréticas. Luego de una tentativa misionera y debido al gran crecimiento que empezó a tener este movimiento religioso, la Iglesia no tuvo otro remedio que pedirle ayuda a la corona de Francia para poder erradicarlos de manera violenta desde 1209 por la Cruzada albigense.
Luego de la larga persecución por parte de la Iglesia católica el movimiento empezó a debilitarse en el siglo XIII, en esa época entró en la clandestinidad y se empezó a extinguir un poco.
Creencias
El movimiento religioso catarismo tiene sus raíces en el gnosticismo y del maniqueísmo. En pocas palabras, podemos decir que la teología de ellos era dualista radical. Para ellos el mundo está hecho por dos mundos opuestos que viven en conflicto, el que es creado por Dios que tiene un lado espiritual y el de Satanás que está hecho por Satán.
Los cátaros pensaban que Satán era el que había creado el mundo, que tiene un parecido con los gnóstico que hablaban del Demiugo. Aunque los gnósticos del siglo I no veían al Demiugo como el diablo, esto era porque para esa época todavía el concepto del Diablo no era tan conocido como hoy en día, luego cada vez se hacía más popular en la Edad Media.
Según los creyentes de este movimiento religioso el Reino de Dios no pertenece a este mundo, él creó los cielos y almas. En cambio, según ellos el Diablo fue el que inventó las guerras, el mundo material y la Iglesia Católica. Para ellos esto, su realidad terrena y la separación de la fe en la Encarnación de Cristo era una herramienta que permitía la corrupción.
Según los cátaros el hombre solo es una realidad transitoria, una “vestidura” de la semilla angelical. Ellos afirmaban que el cielo es donde realmente se produjo el pecado y que se ha manifestado en la carne. Si lo comparamos con la religión católica el vino dado por la carne y que transmite al hombre interior en el presente, al espíritu, como resultado del pecado estaría en un estado de caída.
Para los seguidores del catolicismo la fe en Dios libera, en cambio para los cátaros implicaba un conocimiento de cómo está su espíritu para así depurar su existencia como humanos. Los cátaros no aceptaban nada de la materia, lo veían como una sofisma maligno que impedía que se llegara a la salvación.
Aunque no lo creas los cátaros también creían en la reencarnación. Según ellos esto puede suceder cuando las almas tienen una capacidad de autoconocimiento que les permite llegar a la visión de la divinidad, de esta manera se escapan del mundo material y logran entrar al mundo inmaterial. Tener una vida mística es la manera en la que se puede escapar del cielo, evitando ser corrompido por el mundo material.
Las personas que realmente seguían todas esas normas eran considerados como Perfectos, estos eran vistos como los herederos de los apóstoles, que tenían los dones para poder eliminar los pecados y cualquier relación que tenían las personas con el mundo material.
Por otro lado, ellos iban en contra del bautismo porque está implicada el agua, un elemento que es material y por eso para ellos es considerado como impuro, recordando que esta es una institución de Juan Bautista y por ende no de Cristo. También no estaban a favor del matrimonio para la procreación, porque veían mal que trajeran al mundo material a un alma pura y que esta quede aprisionada en un cuerpo.
Los cátaros estaban en contra de muchas cosas, como también de los alimentos procedentes de la generación, como la leche, la carne y los huevos.
Sin embargo, la vida de los cátaros estaba llena de un gran ascetismo, estricta castidad y eran vegetarianos. Ellos veían la virginidad como el impedimento que permite “terrenalizar” lo espiritual.
Otra de las creencias que tenían los cátaros era que Jesús no encarnó, sino que él se apareció para poder mostrar el camino hacia Dios. Para ellos era imposible que Dios hubiera estado en la tierra de manera material, porque para ellos todo lo que sea material está ligado con el pecado. La manera específica en la que se llema es docetismo. Pensaban que Dios era el Diablo que dió pasó a que existiera el mundo, así como en el Antiguo Testamento.
Solo tenían un sacramento y era el consolamentum. Su eucaristía simbólica es el Melioramentum, sin trasubstación (se refiere a que si Cristo es espiritual y no un hombre, el pan no podía pasar a ser el cuerpo de Cristo). Los juramentos también eran un pecado, ya que los relacionaba con el mundo material.
¿Por qué surgieron los cátaros?
A mediados del siglo XII, en varios puntos de la cristianda empezaron a aparecer comunidades que estaban al margen de la Iglesia católica. Recordemos que a finales del siglo XI ocurrió la revolución del papa Gregorio VII en la institución religiosa, mejor llamada como “reforma gregoriana”.
Esa revolución empezó a rechazar las malas costumbres que poseía el clero, una de esas era la simonía, en pocas palabras, dar dinero a cambio de poder tener un cargo en la Iglesia. También estaba el nicolaísmo que era el amancebamiento de los clérigos.
Para evitar que el poder político tuviera acceso en los temas de la Iglesia, entre 1074 y 1124 los papas iniciaron una larga pugna con los emperadores de esa época, a esto se le llama Querella de las Investiduras. Esto tuvo como resultado que la Iglesia tuviera un nuevo modelo donde reforzaron su poder, tanto así que algunos autores han mencionado la teocracia pontificia.
Descontento del clero
Este hecho dió paso a que una parte del clero estuviera en contra de la nueva manera en la que se estaba llevando la Iglesia, porque seguían defendiendo la práctica de la pureza y que siguiera el modelo de vida evangélico como la única manera en la que se puede llegar a las perfección.
Empezaron a acusar a la jerarquía de Roma como traicioneros de la Iglesia en los tiempos apostólicos, estos señalamientos de parte de ciertas personas del clero empezaron a ser considerados como herejes por la autoridad católica.
Los cátaros naces de este descontento que se empezó a tener de la Iglesia, eran caracterizado por la crítica radical que le tenían al papado, a las personas de la jerarquía romana y por tener la creencia que eran los únicos herederos de los apóstoles, conservando un supuesto poder en donde tenían la posibilidad de salvar a los hombres (virtud que fue dada por Jesús).
En el obispado de Colonia se conocen algunos grupos de cátaros, en las zonas meridionales de la cristiandad, en el sur de Francia específicamente, como también en los condados catalanes en Italia y en el de los Pirineos, allí terminaron quedándose.Los condes de Toulouse y de Foix, los vizcondes de Trencavel apoyaron que estos herejes se quedaran en sus tierras.
Sin embargo, podemos decir que en general los herejes se instalaron en burgos castrales o mejor llamados catros, que eran pequeños pueblos que surgieron del año mil al de los castillos feudales.
Cruzada contra los cátaros
En el incio del siglo XIII inició una cruzada de exterminio por parte de las autoridades de la iglesia católica y por los reyes de Francia, para poder terminar con el nuevo movimiento de creyentes que eran los cátaros.
Los cátaros empezaron a crear iglesias y comunas en el sur y sudeste de Francia, norte de Italia, Aragón, Cataluña y parte de Alemania, con el apoyo de los nobles y de la burguesía de los territorios.
En el año 1000 el catarismo apareció en el condado Toulouse, alarmando a la Iglesia. A mitad del siglo XII la Iglesia debido al poco poder social que tenía y a que sus nuevos dogmas no eran aceptados, mandó a Bernando de Claraval a Languedoc, este era un impulso y motivador de la orden del Temple, para hacer cambiar de opinión los nuevos creyentes herejes. Este intento no tuvo éxito.
En los inicios del siglo XIII el papa Inocencio III empezó a combatir la herejía mandando a Pierre de Cstelnau a excomulgar a Ryymond VI, conde de Touslouse, castigándolo con el despojo de sus tierras y la confiscación de sus bienes.
Pierre muere y el papa aprovecha la situación para como mártir a su enviado y convoca la cruzada contra los herejes.
Arnaud Almaric era el “generalísimo” del ejército. El conde Raymond VI se rindió y fue azotado públicamente. Mientras en Lyon hubo un gran ejército colocaron como sitio a Béziers para la defensa. El ejército cruzado rompieron las murallas y lograron entrar a la ciudad, terminó en incendio y masacre.
En la segunda etapa de la guerra, con la intervención de Luis VIII que tomó como decisión la sumisión del condado que era certificada por el Tratado de París. En la fase final la Inquisición y los militares arrasaron con la resistencia cátara, que por falta de apoyo político terminaron reduciéndose.
Esta guerra se desató por la gran violencia, trajo la decadencia del caterismo, el florecimiento de la cultura languedociana y la formación de la Europa occidental.
En conclusión, es impresionante ver cómo la Iglesia católica no era ejecutor de las religión bondadosa que trataban de profesar. Acabaron con un movimiento religioso que iba en contra de los dogmas nuevos que habían impuesto en la institución religiosa.
¿Existe algún parecido entre la política y la religión? Las dos cuentan con un gran poder y pueden manipular a las masas como deseen, al igual que acabar con cualquier persona o grupo que vaya en contra de sus creencias o se les subleven.
El caterismo fue exterminado por la Iglesia, pero eso no los salvó de que siguieran saliendo a lo largo de la historia nuevos movimientos que piensen y critiquen la manera en la que la institución oficial religiosa lleve la creencia.
No importa cuántas personas morían por ir en contra de sus dogmas, el que la Iglesia tenga la “sabiduría” universal de imponer sus creencias a los demás no ha dejado de estar en vigencia. Todo generado desde infundir el miedo y el terror a todos aquellos creyentes que tengan su fe de manera diferente.
Ahora la gran pregunta es, luego de leer este artículo, ¿Qué piensas de la Iglesia? ¿la sigues viendo igual? Puede que consideres que muchas de las acciones del clérigo no va acorde a lo que vociferan, por eso es que dicen que las palabras deben ir ligadas con las acciones.
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