Tener un buen cuerpo y preocuparnos por nuestro físico está bien, pero no puede ser más importante que alimentar y cultivar nuestro espíritu. A veces nos olvidamos que es más complejo trabajarlo.
El espíritu es la base de muchas cosas en nuestra vida, si lo tenemos roto no podremos vivir nunca en armonía. Trabajar todos esos resentimientos, odios y pensamientos negativos es más complicado, por esa razón pocas personas son las que desean realmente hacerse conscientes e iniciar el trabajo de sanación.
En este artículo hablaremos de todo lo que tiene que ver con el espíritu, desde cuál es su significado hasta una lista donde podrás iniciar con pocas acciones una sanación de tu espíritu. Recuerda que nuestros pensamientos, decisiones y emociones van a darnos la oportunidad de lograr el equilibrio que realmente queremos.
¿Qué es el espíritu?
Cuando hablamos del espíritu nos referimos al don que ofrece un ser que está por encima de nosotros o un dios al hombre, de esta manera nos podemos diferenciar de los demás animales. Es el alma razonable que se encuentra en el pensamiento, la comunión y la espiritualidad.
Como siempre aquí hablamos de la procedencia del latín de cada palabra, viene de spiritus que se relaciona con todo lo que tiene que ver con el aire y significa “respiro”. Cuando lo traducimos al griego es pneûma que está vinculado con el espíritu, la respiración y el aliento.
Espíritu y alma
Hay una gran confusión en qué significa cada una, aquí mostraremos cuáles son las diferencias. Primero es importante saber que en latín es spiritus y anima y en griego es pneûma y psyché. Estos conceptos anteriormente no tenían ninguna importancia, empezaron a tenerlo cuando los introdujeron en el cristianismo. Eran vistos como el sitio donde se encuentran los sentimientos.
Cuando nos referimos a un ser que no es tangible o se considera como fantasmagórico el espíritu y alma son sinónimos. También se puede emplear cuando hablamos de la energía o el ánimo, un ejemplo puede ser “poner alma o poner espíritu al discurso”.
Cuando hablamos de energía o ánimo pueden ser generadores de algo o representar una esencia, como espíritu rebelde o libre, el alma del sitio o de la fiesta; seguramente hasta tú mismo has utilizado alguna de esas frases.
También se puede utilizar cuando una persona tiene habilidades para innovar y para los negocios, se dice que tiene “gracia” para el emprendimiento, en pocas palabras se refiere a que posee un motor para generar nuevos proyectos con ideas fuera de lo común.
Entonces podemos entender que la espiritualidad es el polo opuesto de lo material, es todo lo contrario. Se vincula con algo que no puede ser palpable y por eso se le dice inmaterial, se relaciona con el espíritu. Podemos ejemplificar fácilmente con el ascetismo que su finalidad es cultivar el lado espiritual, o también lo podemos ver en la flor de loto que es un símbolo de la pureza espiritual.
¿El cuerpo, el alma y el espíritu son lo mismo?
El espíritu a diferencia de lo que es el alma, se considera como universal. En cambio, el alma es individual. También recordemos que según la teoría cristiana el hombre está compuesto por tres elementos importantes que son: cuerpo, alma y espíritu.
Podemos decir entonces que el cuerpo es lo que podemos ver a simple vista, es lo carnal. El alma es lo que va a definir nuestra personalidad, allí se encuentra la imaginación, la razón y hasta los propios sentimientos. Por último tenemos el espíritu que es la “herencia divina” que tiene cada uno de nosotros.
En el espíritu podemos encontrar la fé, la esperanza, el mundo espiritual y hasta la reverencia. De hecho, el Espíritu Santo es la viva representación del espíritu divino y sagrado de Dios.
¿Cómo es el espíritu en la filosofía griega?
Los griegos veían el alma o el pneûma como el soplo vital que da vida a cada cuerpo o como el principio. Allí para ellos reside el aire que permite que el Universo tenga vida y que exista el pensamiento que nos permite a nosotros gobernarnos.
Espíritus elementales
Los espíritus elementales son considerados como los espíritus simples de la naturaleza que van a proteger el elemento que les corresponde y que no tienen la posibilidad de poder encarnar. Estos se les asocia a cuatro elementos:
- Aire: sílfides.
- Agua: ondinas.
- Tierra: gnomos.
- Fuego: salamandras.
Espiritualidad
Cuando hablamos de espiritualidad nos referimos a la aceptación, el conocimiento y el cultivo de la esencia intangible de uno mismo. Proviene del girego y está constituida por vos spiritus que tiene como significado “respiro”. Alis es “lo relativo a” y dad que es “cualidad”. Podemos decir que etimológicamente se refiere a que la espiritualidad es todo lo que se relaciona con lo espiritual o del espíritu.
Cuando hablamos de espiritualidad humana la conocemos como la conciencia de nosotros que es completamente inmaterial, no lo podemos ver a simple vista, También está vinculada a algo que está por encima de nosotros, superior a todos los seres que habitamos la tierra.
Ahora bien, cuando hablamos de esa espiritualidad en la religión nos referimos a la dirección y el propio desarrollo de lo espiritual según lo que nos han enseñado y las normas de un dios o hasta un profeta. Podemos ejemplificar con la espiritualidad cristiana, se fundamenta en todas las enseñanzas de cristo y de los 12 discípulos.
La espiritualidad también está muy ligada a que genere un valor superior y positivo, vinculándolo siempre con un comportamiento que sea coherente con los valores éticos y morales que van a permitir el desarrollo de cada individuo.
Por otro lado, en la India hay cuatro leyes de la espiritualidad que las vamos a ver a continuación:
- La persona correcta es la que llega a tu vida.
- Lo que te está pasando es lo único que pudo haber sucedido.
- Cuando decidas comenzar es el momento correcto, no importa cuando sea.
- Si algo finaliza, termina.
Espíritu Santo
Si has tenido alguna vez la duda de quién es el Espíritu Santo y nunca la has aclarado, aquí te ofrecemos los puntos para que puedas comprenderlo.
- Es una persona: cuando hablamos del Espíritu Santo no nos estamos refiriendo a una cosa, es un ser humano como nosotros y por eso nos podemos referir como “él”. Es la tercera persona de la Santísima Trinidad y aunque parezca que es más secreto que el Padre y el Hijo, es considerado tan persona como ellos.
- El Espíritu Santo es Dios: cuando hablamos de que es la tercera persona de la Trinidad no nos referimos que esté por debajo del Padre o el Hijo. Ellos tres son Dios y “tienen una sola divinidad, gloria igual y coeterna majestad”, como está en el credo de Atanasio.
- Toda la vida ha existido el Espíritu Santo, incluso hasta en la época del Antiguo Testamento: si llegas a leer a Dios en el Antiguo Testamento, puede recordar que se habla de las tres personas de la Trinidad, entre ellos podemos encontrar que está el Espíritu Santo.
- En el bautismo y la confirmación se recibe el Espíritu Santo: como ya habíamos dicho antes el Espíritu Santo lo podemos ver de maneras misteriosas y a veces no lo podemos comprender. Una persona lo recibe en el bautismo de una manera especial para luego fortalecer esos dones en lo que viene siendo la confirmación.
- El Espíritu Santo tiene como templo a los cristianos: en ellos está el Espíritu Santo de una manera especial y por esa razón hay consecuencias morales, como lo dice San Pablo: ““Huyan de las relaciones sexuales prohibidas. Cualquier otro pecado que alguien cometa queda fuera de su cuerpo, pero el que tiene esas relaciones sexuales peca contra su propio cuerpo ¿No saben que su cuerpo es templo del Espíritu Santo que han recibido de Dios y que está en ustedes? Ya no se pertenecen a sí mismos. Ustedes han sido comprados a un precio muy alto; procuren, pues, que sus cuerpos sirvan a la gloria de Dios”. (1 Cor 6:18-20).
¿Cómo sanar el espíritu?
Para iniciar con esta importante parte del artículo es bueno que conozcas este proverbio chino: “El cuerpo se mantiene por los alimentos y el alma por las buenas acciones.” Proverbio Chino.
Si tenemos un espíritu roto nunca podremos vivir en paz y en armonía. Cultivarlo es una de las tareas más difíciles que nos podemos poner a nosotros mismos, es hasta más complicado que poseer buenos hábitos para nuestro cuerpo y que intentar tener siempre buenos pensamientos para atraer cosas positivas a nuestra vida.
Es importante que nos hagamos conscientes de los malos sentimientos que tenemos para poder alejarnos de ellos, tenemos que liberarnos de cualquier remordimiento, de rencores y lograr perdonar realmente a los demás y también a nosotros mismo. Si podemos lograr todo esto que se mencionó estaremos evolucionando como seres humanos.
Para que se logre esa evolución también es importante actuar a través del amor, del respeto y del entendimiento, resaltando que el agradecimiento nos ayudará a que seamos seres humanos con propósitos tanto individualmente como también en la sociedad.
Recuerda que la manera en la que te relacionas con los demás va a permitir que tengas una mente o espíritu sano, con pequeños cambios podrás lograr grandes cosas. Aquí verás una lista de buenos hábitos que te alimentarán el espíritu:
- Iniciar cada día con pensamientos positivos es importante.
- Cada día ten metas fijas y concéntrate en cumplirlas.
- Toma el hábito de leer algo cada día.
- Todo pensamiento que te venga a la cabeza escríbelo.
- Baila o canta para que eleves tu estado de ánimo.
- Empieza a estudiar otro idioma.
- Acércate a tus amigos y familia, no te alejes de ellos.
- Con cada persona que te topes sé amable.
- Evita a toda costa cualquier drama o chisme, porque bajan tu vibración.
- Sonríe, no lo olvides.
Curandero para sanar tu espíritu
Alguna vez en la vida hemos escuchado la palabra “curandero”, se le denomina como un sanador tradicional que cura el espíritu y problemas físicos son remedios naturales. También tiene roles como del chamán y como de un hombre que puede curar.
Un curandero tiene la posibilidad de curar no solo enfermedades espirituales, sino también mentales, físicas y emocionales por medio de masajes y de herbolarios. También recibe ayuda de espíritus o deidades para poder sanar los males mágicos y purificar el espíritu.
Cada curandero tiene una especialización, están los que se dedican a las yerbas (hierbas), hueseras (huesos), parteras (partos), oracionistas (rezos), entre otros.
A veces creemos que podemos solos con nuestros problemas, una herida en el espíritu puede apagar la vida de una manera drástica y para mal. Por esa razón es que es bueno pedir ayuda cuando lo necesitamos, un curandero nos puede ayudar a que podamos volver a brillar como lo hacíamos antes.
En conclusión, recordemos que esa alma racional donde se encuentra el pensamiento, la comunión y la espiritualidad es el espíritu. Es una de las muchas cosas que nos diferencia de los animales.
Aquí pudimos entender que cuidar nuestro aspecto físico es importante, pero también vemos lo indispensable que es gozar de un buen espíritu. Aunque no lo creamos traerá consigo buenas oportunidades en tu vida, relacionarse de mejor manera con los demás, tener paz mental, tener pensamientos que te hagan vibrar siempre en positivo.
En realidad tener un espíritu trabajado no es una tarea tan fácil, pero tampoco es imposible. Puedes iniciar con pequeñas acciones, cada vez que te levantes ten un buen pensamiento, agradece todo lo que tienes, trata bien a todas las personas que te rodean, júntate con las personas que son especiales para ti, baila, ríe, canta.
Recuerda que el espíritu es el motor que va a permitir que logres cosas en tu vida y si ese motor está atrofiado, necesita ser reparado para que vuelva a funcionar todo como debe ser. Cada vez que necesites un empujón puedes leer este artículo, de esta manera conseguirás en palabras la motivación que tanto necesitas.
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